Con tobillera y en prisión domiciliaria, El Pepo habla por primera vez desde el trágico accidente

El Pepo, en su casa de Santos Lugares, donde transcurre su prisión domiciliaria con la tobillera puesta. Foto: Franco Fafasuli
El músico dio una entrevista exclusiva a Infobae, donde reconoce que iba tomando alcohol, pero no a 139 kilómetros por hora la noche en que murieron dos personas que lo acompañaban en su camioneta.
“La primera canción que voy a grabar la compuse sonámbulo en la cárcel, y es sobre el accidente”, dice Rubén Darío “El Pepo” Castiñeira casi sobre la despedida. Está en su casa de Santos Lugares, convertida en prisión domiciliaria según ordenó el juez de Garantías Juan Cristian Gasquet y confirmó el jueves 2 de enero la Cámara de Apelaciones de Dolores. Ahora, los barrotes de su cárcel son la tobillera que lleva en su pierna derecha. En la izquierda sería imposible colocarla: aún luce un yeso por la fractura que sufrió jugando al fútbol en el penal de Melchor Romero y le operaron en el Sanatorio de La Trinidad. Allí esperará el juicio oral donde se dirimirá su suerte: la carátula indica “homicidio culposo doblemente agravado” por la muerte de Nicolás Carabajal e Ignacio Abosaleh, que iban en el asiento trasero de la camioneta Honda CRV que conducía el cantante la noche del 20 de julio de 2019 en la ruta 63, en Dolores, cuando volcó.
El Pepo se sienta en la cocina, baja el volumen de la tele donde hasta hace un momento miraba TyC Sports y se ceba un mate. Está vestido de Racing desde la gorra hasta las medias, y en el ambiente flota un inequívoco aroma a gatos: dos bolsas de piedritas y el propio dueño de casa lo confirman. Tiene seis y a uno, dice, “lo mató un auto la semana pasada”. Justo antes de empezar la primera entrevista que brinda desde el trágico accidente llega su mujer, Josefina Cúneo, La Pepa, que se sienta a un costado. “Volver a casa fue lindo por un montón de factores -comienza el músico-. Por estar con la conciencia tranquila y pensar por lo que pasé para encarar un nuevo camino en mi vida. Fue muy feo lo que sucedió, y me hizo tomar cosas en cuenta”.
-¿Qué cosas?
-Haber sido tan débil en un montón de situaciones, no haber escuchado a la gente que quiere lo mejor para mi desde siempre, elegir caminos equivocados.
-¿Te referis a las adicciones, a las drogas y el alcohol? Antes del accidente decías que estabas limpio. ¿Por que volviste?
-Por débil, por darle cabida a cosas que me hacen mal, por dejar puertas abiertas. Este regreso aliviado a mi casa me encuentra con la posiblidad de encarar un tratamiento acorde a mi enfermedad, porque soy consciente que tengo una enfermedad. Si bien la peleo desde hace muchos año,s no soy constante y eso me lleva a recaer.
-¿Qué te lleva a eso? ¿La noche, las malas compañias?
-Las malas elecciones que uno hace en la vida, poniendo en primer lugar a gente que me influencia mal. No digo que tengan malas intenciones, pero no van por el camino que yo tengo que ir.
-¿Quienes son los que te quieren hoy?
-Mi familia, mis amigos verdaderos, mis abogados Miguel Angel Pierri y Marino Alejandro Cid, que están hacendo un trabajo buenísimo para que este bien.
-¿Cómo esta hoy tu relación con Josefina?
-Bien, gracias a Dios bien. Ya tuvimos la primera charla con el sociólogo del tratamiento que voy a seguir, tengo charlas constantes con mi perito psiquiatra Enrique De Rosa, el cual también es parte del equipo de la defensa, y quien me tranquiliza.
